Cada 27 de marzo se celebra el Día Mundial del Teatro. Un teatro es un espacio mágico donde todos hemos soñado alguna vez. El espectáculo nos invade, la historia representada nos conquista y experimentamos una sensación única que se apodera de nosotros. Todo parece posible en ese lugar llamado teatro y más se multiplica la experiencia si nos encontramos ante una de estas maravillas que vamos a ver. En homenaje a su día, hagamos un recorrido por los teatros más impresionantes que existen en el mundo. ¡Que comience el espectáculo!
1. El Liceo de Barcelona (España)
Empezamos en España, con el Gran Teatre del Liceu, una joya arquitectónica que se encuentra en plenas Ramblas de Barcelona. Es el más antiguo, bello y emblemático teatro de la Ciudad Condal, y su esplendor no tiene nada que envidiarle a muchos de sus semejantes europeos. Es el teatro más prestigioso de la ciudad y lleva activo 150 años conservando su identidad. Es uno de los referentes europeos para la ópera.
Los catalanes eran muy aficionados al teatro, por lo cual se concibió gran un teatro para Barcelona y así se hizo, a lo grande. Construyendo uno con el mayor aforo de Europa, el Liceo cuenta con casi 2.300 localidades.
A modo de curiosidad, el Gran Teatre del Liceu de Barcelona, presume de ser uno de los teatros más sostenibles. Ha adoptado un sistema de gestión ambiental con una eficiencia energética y gestión de residuos que lo convierte en el primer referente europeo de sostenibilidad.
2. Teatro La Fenice de Venecia (Italia)
El majestuoso teatro veneciano La Fenice se construyó en 1792 y es el principal teatro de Ópera de Italia. Atacado por el fuego en múltiples ocasiones y reconstruido posteriormente, destaca por ser el teatro lírico de Venecia por excelencia. Desde sus orígenes, siempre ha sido un teatro envuelto en polémicas por los costes y premura de su construcción. Cuenta con cinco pisos y un aforo para 1.500 plazas.
El mismísimo Verdi vivió aquí tanto éxitos como fracasos. Incluso fue abucheado por el público durante la representación de La Traviata.
En la actualidad, como es costumbre desde hace años, se llenan sus butacas para recibir el Concierto de Nochevieja, una alternativa al concierto de Año Nuevo que tiene lugar en el Musikverein de Viena la mañana del 1 de enero.
3. Teatro Colón de Buenos Aires (Argentina)
Si antes hablábamos de referentes europeos, en esta ocasión el Teatro de Colón es sin duda el teatro de ópera latinoamericano más importante y un símbolo para la ciudad de Buenos Aires. Destaca por grandes dimensiones y majestuosidad interior. Puede albergar casi a 2.500 espectadores sentados y mide más de 8.000 metros cuadrados.
Aunque fue concebido para acoger únicamente espectáculos de cante lírico, bajo su impresionante cúpula han pasado desde hace más de cien años increíbles conciertos sinfónicos, óperas y ballets. Al entrar al teatro de Colón el espectador siente una magia, una mística de que algo fantástico va a acontecer.
4. Ópera Palais Garnier de París (Francia)
De estilo Neobarroco, la conocida como Ópera de París, cuenta con un aforo para 1.979 personas. El Palais Garnier es un teatro predominante de ópera, cuya construcción tuvo lugar en la segunda mitad del siglo XIX. Se hizo conocido muy pronto por su inmensidad y belleza. Desde sus inicios fue la sede principal de la Ópera de París pero actualmente se utiliza principalmente para el ballet.
El teatro es visita obligada para el turista en París y uno de los edificios más conocidos de la capital francesa. Además de ser uno de los prestigiosos teatros de ópera más importantes del mundo también destaca por haber sido el escenario de la novela El Fantasma de la Opera, de Gaston Leroux en 1911.
5. Ópera Nacional de Viena (Austria)
El teatro del Estado de Viena, además de ser uno de los teatros más impresionantes y una de las principales referencias de la ópera a escala mundial. Su impresionante arquitectura no deja indiferente a nadie. Asistir a este teatro es subir al más alto nivel en todos los sentidos.
Abrió sus puertas con una gran obra de Mozart, Don Giovanni y aunque casi desaparece en la II Guerra Mundial por los destrozos que sufrió, pero resurgió de sus cenizas con Beethoven y la ópera Fidelia.
En la actualidad, frente a su telón, se representan más de cincuenta óperas y ballets al año, un espectáculo que cualquiera debería ver al menos una vez en la vida.
